Todos los cañones de la lucha contra el dengue deben apuntar a los fondos de las casas. Allí, en diferentes reservorios de agua, la presencia de larvas del mosquito transmisor de la enfermedad llega a un nivel de alarma, como consecuencia de la gran cantidad de lluvias que se registraron en la ciudad.
Estamos en peligro, después de las lluvias y con las altas temperaturas, tenemos altísimos índices aédicos. En otras palabras, hay una inmensa población de mosquitos Aedes aegypti, lo cual significa un gran riesgo si aparecen casos importados de dengue, ya que estos insectos son los que transmiten la enfermedad a las personas.
Todos los días: Combatir al Aedes aegypti en el hogar debe ser una rutina: sacar la basura, limpiar la casa, vaciar recipientes, cambiar el agua de floreros.
Agua limpia: Evitar que se acumule agua limpia proveniente de la lluvia o de las tuberías.
Controles: Para detectar los criaderos se requiere de una revisión exhaustiva y sistemática de la vivienda pues no siempre son evidentes a simple vista y pueden surgir de improviso después de la lluvia.
Piletas: Mantener limpias y con cloro las piletas de natación y cambiar el agua en forma periódica a las de lona.
Cortar el pasto: Mantener los patios desmalezados.
TODOS TENEMOS QUE PREVENIR ESTA ENFERMEDAD
TOMANDO LAS SIGUIENTES MEDIDAS:
Evitá arrojar recipientes o basura en patios, terrazas, calles y baldíos.
Mantené ordenados y desmalezados patios y jardines.
Destapá los desagües de lluvia de los techos.
Eliminá el agua de los huecos de árboles, rocas, paredes, pozos y letrinas abandonadas.
Enterrá o eliminá todo tipo de basura como latas, cáscaras, llantas y otros objetos que puedan juntar agua.
Ordená los recipientes útiles que puedan acumular agua, poniéndolos boca abajo o colocándoles una tapa.
Mantené tapados los tanques y recipientes que se usan para recolectar agua.
Cambiá el agua de bebederos de animales, platos y portamacetas, colectores de desagües de aire acondicionado y lluvia, dentro y fuera de la casa, cada 3 días.
Utilizá en floreros arena húmeda en lugar de agua.
Mantené limpias, cloradas o vacías las piletas de natación fuera de la temporada.
Identificá posibles criaderos en tu barrio para informar a las autoridades municipales.